viernes, 27 de enero de 2012

El diario de Antonio Díaz

«Dicen que en todas las guerras hay personajes sin escrúpulos que amasan grandes fortunas y poder, y otros que siendo ya miserables se convierten en mezquinos; pero todos ellos tienen un denominador común: la vileza. Dicen que si las confrontaciones son fratricidas los seres humanos sacan lo peor de su lado oscuro, la crueldad alcanza límites insospechados y la ruindad se apodera de todos los buenos sentimientos que, se supone, tenemos en el fondo de nuestras almas. Dicen que las guerras son capaces de convertir a corderos en lobos y a estos en verdaderas alimañas. Dicen también que, en la guerra, nuestros actos están dominados por el miedo y la desconfianza, que los amigos se tornan enemigos y que, entonces, y solamente entonces, es cuando la amistad se pone a prueba. Aquella que sobrevive en estas circunstancias jamás caduca ni se desvanece. Yo tuve la desgracia y la suerte de conocer todos esos matices